La Agencia Nacional de Tierras (ANT) ha decidido revocar la entrega de la Finca La Carcajada debido a una serie de presuntas irregularidades en el proceso.
Felipe Harman, director de la entidad, ha señalado que este es el primer caso en el país en el que se revoca un predio ya asignado a beneficiarios, como parte de la reforma agraria en Colombia. Entre las acusaciones que llevaron a esta decisión se encuentran las prácticas ilegales del representante de la organización Buenavista sin Hambre, quien supuestamente cobraba cuotas mensuales a los beneficiarios del predio. Además, se descubrió que había 700 cabezas de ganado en la finca y que se estaban alquilando hectáreas para el cultivo de patilla a terceros, lo cual impedía que los beneficiarios cultivaran para su propio sustento.
“No podemos permitir que unos avivatos violen los derechos de los beneficiarios para beneficio propio”, declaró Harman con firmeza, subrayando la necesidad de proteger los derechos de los agricultores.
La revocatoria afecta únicamente a la organización Buenavista sin Hambre, de las 20 mil hectáreas entregadas en Buenavista a tres organizaciones beneficiarias.
Las otras dos organizaciones: Asoproapema y Asocamgenova, continúan en posesión de sus tierras. Como parte de esta reestructuración, las 51 familias campesinas que estaban bajo Buenavista sin Hambre fueron reasignadas y distribuidas entre las dos organizaciones restantes.
Cabe destacar que la Finca La Carcajada, que abarca una extensión de 3.213 hectáreas, ahora está íntegramente bajo la administración de las dos organizaciones que siguen operando en la zona, asegurando así un uso justo y equitativo de la tierra conforme a los objetivos de la reforma agraria.
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