La investigación también reveló que, si bien algunos medicamentos requeridos no tenían existencias en bodega, en otros casos sí había disponibilidad, pero no se estaban distribuyendo adecuadamente.
La Superintendencia de Salud confirmó que durante una auditoría a las bodegas de Audifarma, ubicadas a las afueras de Bogotá, se encontraron grandes cantidades de medicamentos que figuraban como no disponibles para los pacientes en los puntos de dispensación.
El informe de la Supersalud detalló que, de una lista de 22 medicamentos de alta demanda, al menos ocho tenían suficientes existencias en la bodega, incluyendo insulina, a pesar de que muchos usuarios la tenían registrada como “pendiente” en sus órdenes de entrega.
El superintendente de Salud, Giovanny Rubiano, calificó la situación como “incongruente” y señaló que no hay justificación para que estos medicamentos no lleguen a los pacientes. “No existe justificación alguna, ni de tipo administrativo ni de ninguna otra índole, para que estos medicamentos estén almacenados y no a disposición de los usuarios que los necesitan”, enfatizó.
Ante este hallazgo, la Supersalud ordenó a Audifarma trasladar en menos de 24 horas todos los medicamentos retenidos en bodega hacia los puntos de dispensación. “No hay excusa para no suministrar los medicamentos, poniendo en riesgo la salud de los pacientes”, afirmó el organismo.
Durante la auditoría, representantes de Audifarma argumentaron que las 113.000 unidades de insulina encontradas en su bodega dependían de la asignación de cada EPS para su entrega. Sin embargo, la Supersalud les recordó que los trámites administrativos no pueden ser una barrera para garantizar el acceso oportuno a los tratamientos.
El presidente Gustavo Petro se pronunció sobre la situación en su cuenta de X, asegurando que la auditoría confirmó la presencia de medicamentos en bodega que figuraban como faltantes en los puntos de dispensación. “Se ordenó el inmediato traslado y dispensación de los medicamentos pendientes de suministro”, indicó el mandatario.
La investigación también reveló que, si bien algunos medicamentos requeridos no tenían existencias en bodega, en otros casos sí había disponibilidad, pero no se estaban distribuyendo adecuadamente. Esto ha generado preocupación entre los usuarios, quienes han reportado dificultades para acceder a sus tratamientos a pesar de las sanciones impuestas a Audifarma.
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