Un nuevo caso de inseguridad sacude a la comunidad religiosa del Atlántico. Al menos 35 personas fueron víctimas de un hurto masivo durante un retiro espiritual organizado por el grupo Caminantes de Emaús, realizado en las instalaciones del Seminario Mayor Juan XXIII, ubicado en el corregimiento de Salgar, jurisdicción de Puerto Colombia.
El hecho, denunciado en la mañana de este domingo, se habría registrado durante la madrugada, cuando un grupo de delincuentes ingresó a la zona de parqueo del seminario y violentó una camioneta en la que se habían guardado objetos personales de valor de los asistentes, como parte del protocolo habitual del encuentro.
Entre los elementos hurtados se encuentran más de 35 teléfonos celulares, prendas de vestir, relojes de alta gama y joyas, que estaban bajo custodia en el vehículo mientras se desarrollaban las actividades espirituales del retiro, que inició el pasado viernes.
Agentes de la Sijín de la Policía Metropolitana de Barranquilla llegaron al lugar para realizar labores de inspección técnica y levantamiento de huellas dactilares. Las autoridades manejan la hipótesis de que los delincuentes actuaron con información precisa sobre la ubicación del vehículo y el momento oportuno para actuar, lo que ha encendido las alarmas sobre una posible filtración interna.
Este incidente recuerda otro caso ocurrido en septiembre de 2023, también en el Seminario Juan XXIII, cuando un grupo de al menos 10 delincuentes ingresó al lugar durante un retiro de sacerdotes, desarmaron al vigilante, amordazaron a los religiosos y robaron sus pertenencias.
Las autoridades han abierto una investigación formal para esclarecer los hechos y determinar si existe una red criminal que estaría identificando estos eventos religiosos como blancos recurrentes de hurto.
La comunidad espera una pronta respuesta por parte de las autoridades para garantizar la seguridad en espacios destinados al recogimiento espiritual y la reflexión.
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