España peninsular y Portugal vivieron este lunes un apagón eléctrico sin precedentes, que dejó sin luz a miles de ciudadanos en quince comunidades autónomas. Según Red Eléctrica, el colapso fue provocado por una fuerte oscilación en el flujo de potencia y una pérdida de generación “muy importante”, lo que derivó en la desconexión del sistema eléctrico peninsular del resto del sistema europeo, particularmente a través de la interconexión con Francia.
Durante la emergencia, importantes infraestructuras como la Estación de Atocha en Madrid quedaron sin servicio, afectando a trenes y dejando a pasajeros varados. El Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat Valenciana activó la Situación 2 del Plan Territorial de Emergencias, mientras los bomberos de Castellón realizaron más de 50 servicios, incluidos 33 rescates de personas atrapadas en ascensores. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, declaró la emergencia nacional en Andalucía, Extremadura, Murcia, La Rioja y Madrid.
Mientras tanto, las autoridades advirtieron sobre la proliferación de bulos en redes sociales. Desde VerificaRTVE aclararon que rumores sobre un supuesto ataque cibernético ruso fueron falsos, instando a la población a informarse únicamente a través de medios oficiales y contrastados para evitar la desinformación durante la crisis.
Gracias a la respuesta coordinada, el suministro eléctrico comenzó a restablecerse progresivamente. Francia envió hasta 2.000 MW de electricidad a España a través de las interconexiones de Cataluña y el País Vasco, ayudando a atender inicialmente el 35,1% de la demanda energética. Actualmente, el servicio ha sido recuperado en las áreas afectadas, aunque las autoridades piden cautela y mantener medidas de prevención para evitar nuevas sobrecargas.
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