Una pareja de turistas procedente de Cali vivió un momento incómodo en las playas de Cartagena cuando operadores de moto acuática intentaron cobrarles 1,5 millones de pesos por solo cinco minutos de uso del servicio. El incidente ocurrió tras el vuelco de la embarcación, hecho considerado común en este tipo de actividades recreativas, pero que los operarios usaron como excusa para inflar el precio inicialmente acordado.
Cobro abusivo en Cartagena
Según las autoridades, el alquiler del jet ski se fijó en 150.000 pesos. No obstante, tras el vuelco, los responsables del servicio añadieron un cobro arbitrario de 150.000 pesos y luego intentaron justificar un cobro total cercano a los dos millones de pesos. La rápida intervención del director de Distriseguridad, Jaime Hernández, permitió que el abuso fuera detenido y se ordenó la devolución inmediata del dinero cobrado de forma irregular.
“Si un jet ski se voltea, no hay razón para cobrar más. Estos abusos no serán tolerados”, advirtió Hernández, quien aseguró que, de repetirse situaciones similares, las embarcaciones serán inmovilizadas y los operarios retirados de la playa. Finalmente, la pareja afectada solo pagó 300.000 pesos, aunque la cifra seguía duplicando el valor pactado.
Este hecho ha encendido las alertas sobre la necesidad de mayor regulación en las actividades turísticas de Cartagena. Las autoridades locales anunciaron el fortalecimiento de los controles para prevenir cobros excesivos y garantizar una experiencia segura y justa para los visitantes.
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