Con un uso sin precedentes de tecnología militar, el ELN ejecutó un ataque contra el Ejército Nacional utilizando drones equipados con cámaras térmicas e infrarrojas, además de explosivos. El hecho, que ocurrió en zona rural del municipio de El Carmen, dejó tres soldados muertos y ocho heridos, marcando un preocupante precedente en los métodos de guerra empleados por este grupo armado ilegal.
Fuentes militares revelaron que los drones empleados por el ELN estaban cargados con al menos seis granadas y fueron capaces de detectar a los uniformados durante su desplazamiento nocturno, gracias a sensores de calor y visión nocturna. La precisión del ataque ejecutado desde el cielo sorprendió por su nivel de planeación y efectividad, lo que lo convierte en el atentado más tecnológico perpetrado por este grupo en Colombia hasta la fecha.
Los militares afectados habían recibido abastecimiento en la tarde y, como lo establecen los protocolos, comenzaron su movilización al anochecer. Sin embargo, el calor emitido por los cuerpos en movimiento habría sido detectado por los sensores térmicos de los drones, lo que facilitó su ubicación en medio de la vegetación. “Fue un ataque quirúrgico, imposible de anticipar con los medios actuales”, indicó una fuente del Ejército.
Las víctimas mortales fueron identificadas como Jesús Alberto Sánchez Anaya (Atlántico), Jader Luis Calle Núñez (Sucre) y Héctor Miguel Ramos Olivera (Córdoba). Los ocho soldados heridos recibieron atención médica inmediata y fueron trasladados a centros asistenciales.
Este ataque ha generado preocupación entre expertos en seguridad nacional, quienes advierten sobre la necesidad urgente de fortalecer las capacidades tecnológicas de la Fuerza Pública para enfrentar nuevas formas de guerra asimétrica.
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