El congresista David Racero, ex presidente de la Cámara de Representantes y uno de los principales voceros del Pacto Histórico, enfrenta una nueva controversia tras la publicación de un audio que lo comprometería con prácticas laborales cuestionables en un negocio de su propiedad.
La denuncia fue revelada por el periodista Daniel Coronell a través del portal Los Danieles, donde se expone que Racero estaría ofreciendo empleos en su fruver con condiciones inferiores a las establecidas por la ley. Según el audio divulgado, el parlamentario propone una remuneración mensual de un millón de pesos por jornadas de trabajo de 13 horas diarias —desde las 7:00 a.m. hasta las 8:00 p.m.— y con solo un día de descanso a la semana.
En la grabación, se escucha al propio Racero describiendo las funciones del cargo como “todero”, es decir, una persona encargada de realizar múltiples labores que incluyen atención en caja, preparación de pulpas, aseo de baños y pisos, así como la manipulación de alimentos. “Ellos son toderos, no solo caja, sino que también arreglan, hacen pulpa, hacen aseo, lavan baños, lavan los pisos, arreglan las comidas; o sea, estar dispuesto para todo. Cajera, pero de todo”, dice el congresista en el audio.
La publicación ha provocado una oleada de críticas en redes sociales y entre diversos sectores políticos, donde se cuestiona el contraste entre el discurso público del representante —quien ha sido un firme defensor de la reforma laboral que busca mejorar las condiciones de los trabajadores— y las condiciones laborales que estaría promoviendo en su empresa privada.
Para muchos, esta situación representa un evidente “doble rasero” por parte de Racero, lo que ha reavivado el debate sobre la coherencia entre las posturas políticas y las prácticas personales de los líderes públicos.
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