En medio del luto que embarga a varias familias del municipio de Tierralta, Córdoba, por la trágica avalancha ocurrida en Bello, Antioquia, un nuevo hecho ha causado indignación y repudio: delincuentes están intentando estafar a los dolientes, aprovechando su vulnerabilidad emocional.
Cinco de las víctimas fatales del deslizamiento de tierra registrado entre los barrios El Pinal y Altos de Oriente, en el Valle de Aburrá, eran oriundas de Tierralta. Se trata de César Hoyos Cantero, Mileidy Oquendo, Cecilia Oquendo (de la vereda Carrizola), y Yohana Garcés Durango junto a su pequeño hijo Isaac David Garcés (del barrio 9 de Agosto). Todos ellos habían migrado a Antioquia en busca de un mejor futuro.
La tragedia, provocada por intensas lluvias que generaron un movimiento en masa, dejó al menos 20 muertos y varios desaparecidos. Sin embargo, el dolor de los tierraltenses no termina ahí. Según denuncias, inescrupulosos se están haciendo pasar por representantes de una supuesta fundación con sede en Montería, contactando a las familias afectadas para prometer ayudas humanitarias falsas.
Utilizando el número 314 500 4059, los estafadores intentan obtener información sensible e incluso dinero, bajo el pretexto de gestionar apoyos para las víctimas.
La situación ha generado gran rechazo en la comunidad de Tierralta, donde el duelo ya es profundo. Sobrevivientes y familiares como Clarena Oquendo y Yoimar Martínez aún enfrentan el dolor de la pérdida, mientras ahora deben lidiar con la amenaza de caer en manos de estos delincuentes.
Las autoridades locales ya han sido notificadas y hacen un llamado a la ciudadanía para que no entregue datos personales, denuncie cualquier contacto sospechoso y esté alerta ante este tipo de engaños que buscan lucrarse del sufrimiento ajeno.
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