Álvaro Leyva lanza dura advertencia a Petro y exige salida de Sarabia y Benedetti
En una carta de cuatro páginas dirigida al presidente Gustavo Petro, el exministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva, lanzó graves señalamientos contra el círculo más cercano del mandatario y exigió la salida inmediata de figuras clave de su gobierno, como Laura Sarabia y Armando Benedetti.
El excanciller acusa a estos funcionarios de haber “abusado” del presidente y de estar causándole un daño irreparable. “Se han aprovechado de su complejísima situación y le han hecho y continúan haciéndole terrible daño”, escribió Leyva, señalando directamente a Sarabia, Benedetti y el presidente de Ecopetrol. “Dícese de ellos que lo tienen secuestrado”, añadió, en una afirmación que revela el grado de descomposición institucional que, según él, atraviesa la Casa de Nariño.
Leyva no escatimó en detalles sobre su experiencia como canciller y las trabas que enfrentó para comunicarse con el propio jefe de Estado. Asegura que Laura Sarabia —entonces jefa de despacho y hoy canciller— manejaba el acceso a Petro con total arbitrariedad: “Me hacía esperar por horas con la excusa de que usted eventualmente me recibiría. Comprendí que ella era dueña de su tiempo, de algunos quehaceres suyos y que, además, le satisfacía algunas necesidades personales”, afirmó.
También se refirió a Armando Benedetti, actual ministro del Interior, a quien él mismo nombró embajador en Venezuela. Según Leyva, Benedetti no quería aceptar el cargo diplomático porque aspiraba a una posición de mayor poder, revelando las pugnas internas por el control del gobierno.
Pero lo más grave llegó hacia el final de la carta, cuando Leyva menciona un episodio ocurrido durante una visita oficial a París. Según el exministro, Petro desapareció durante dos días, lo que le permitió confirmar, en sus palabras, “que usted tenía el problema de la drogadicción”. Una afirmación de alto calibre que plantea serios interrogantes sobre la capacidad del presidente para ejercer su cargo.
“Guardo en mi interior la pena de no haber intentado extenderle la mano. Lo cierto es que nunca se repuso usted. Su recuperación lastimosamente no ha tenido lugar”, concluye Leyva, en una misiva que no solo expone una ruptura profunda con el gobierno, sino que lanza serias dudas sobre la salud del poder en Colombia.
¿Le resultó útil este artículo?
