La fiebre amarilla sigue siendo una amenaza latente en el país. De acuerdo con datos recientes de la EPS Famisanar, más de 288 municipios colombianos han sido clasificados como zonas de alto riesgo por fiebre amarilla, y 110 como zonas de muy alto riesgo. El panorama ha encendido las alertas de las autoridades de salud y ha puesto sobre la mesa una pregunta crucial: ¿Cuándo fue la última vez que revisó su carné de vacunación?
La fiebre amarilla es una enfermedad viral transmitida por la picadura de un mosquito que habita principalmente en zonas tropicales. En sus primeras etapas puede confundirse con una simple fiebre, pero en menos de 24 horas puede derivar en complicaciones graves como hemorragias, insuficiencia hepática o incluso la muerte.
La buena noticia es que la vacuna contra la fiebre amarilla es altamente efectiva. Se aplica una sola vez en la vida, no requiere refuerzos y está indicada para personas entre los 9 meses y los 59 años. No obstante, hay grupos en los que está contraindicada: pacientes inmunocomprometidos, personas en tratamiento de cáncer o quimioterapia, embarazadas, mujeres lactantes y quienes tengan alergia al huevo o a los componentes de la vacuna.
“En un país donde regiones como el Huila, Tolima, Amazonas, Meta, La Guajira o el Chocó figuran entre las más expuestas, la prevención comienza por una decisión oportuna. La fiebre amarilla no espera. Tu salud tampoco debería hacerlo”, advirtió la EPS Famisanar en su más reciente comunicado.
Las autoridades reiteran la importancia de verificar el estado de vacunación antes de viajar a zonas de riesgo, y acudir a los puntos de vacunación autorizados, donde la dosis se aplica de forma gratuita como parte del esquema nacional de inmunización.
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