Regresa el terror a las carreteras del país tras ataque a bus en Valdivia, Antioquia
Un nuevo episodio de violencia pone en entredicho la llamada “paz total” del gobierno Petro. Esta vez, la escena del terror fue la vía que comunica a Montería con Medellín, a la altura del sector La Paulina, en jurisdicción del municipio de Valdivia (Antioquia), donde un bus de la empresa Brasilia fue atacado con arma de fuego de largo alcance.
El atentado dejó al menos dos personas heridas: el conductor del vehículo y un pasajero, aunque aún no se ha confirmado si fue por impacto de bala directo o por esquirlas de los vidrios tras la entrada de los proyectiles. Según versiones de otros transportadores, en la vía también habría sido dejado un cilindro que contendría explosivos, lo que obligó al cierre parcial del corredor vial.
“Ya no se puede viajar ni por carretera entonces”, reclamó con impotencia uno de los pasajeros, reflejando el temor creciente de quienes necesitan movilizarse por las rutas nacionales.
Este nuevo hecho de inseguridad revive los peores recuerdos del pasado reciente en Colombia, cuando el control territorial de grupos armados ilegales y el miedo en las vías eran el pan de cada día. A pesar de los millonarios recursos y anuncios del gobierno en torno a su política de “paz total”, lo que se vive en regiones como el Bajo Cauca y el norte de Antioquia es una escalada del conflicto que no cesa.
Hasta el momento, ni el Ministerio de Defensa ni la Presidencia se han pronunciado oficialmente sobre este atentado que reaviva el debate sobre si el país avanza hacia la paz o retrocede hacia el caos.
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