Los constantes ataques al Proyecto Sucre Norte amenazan la confianza de inversionistas nacionales e internacionales en el sector gasífero colombiano.
La escalada de violencia contra el proyecto Sucre Norte, operado por Canacol Energy en San Marcos, Sucre, pone en jaque millonarias inversiones privadas y compromete el futuro del desarrollo energético en el Caribe colombiano.
Así lo denunció la Cámara Colombiana de Petróleo, Gas y Energía, Campetrol, que reaccionó con un fuerte llamado a proteger la seguridad jurídica y operativa.
Los eventos violentos ponen en riesgo la vida e integridad de trabajadores y contratistas, además de afectar la estabilidad operativa y económica del proyecto.
Campetrol señaló que estas acciones tienen consecuencias directas sobre el abastecimiento de gas, la inversión privada y el empleo en la región.
La persistencia de estos hechos compromete elementos fundamentales para el funcionamiento del sector energético. Campetrol rechazó cualquier forma de presión que atente contra el Estado de Derecho y la seguridad energética del país.
Aunque la organización reconoce el derecho a la protesta, enfatizó que este debe ejercerse en el marco de la legalidad, sin afectar los derechos fundamentales de quienes trabajan por el desarrollo del sector.
Campetrol hizo un llamado al Gobierno Nacional, autoridades locales y actores sociales para que se restablezca de manera urgente el orden público. La cámara propone abrir espacios efectivos de diálogo que permitan resolver las diferencias a través de canales institucionales.
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