Juan Soto por fin aparece para ganarse su contrato y terminar con la pesadilla de los Mets

Los New York Mets vivieron una noche mágica y volvieron a los abrazos. El partido glorioso contra los Philadelphia Phillies en Citizens Bank Park será recordado por mucho tiempo por una increíble actuación del equipo y la confirmación de que la inversión sobre Juan Soto valió la pena, ya que se lució en el campo de juego.

El reciente encuentro fue una explosión ofensiva sin precedentes para los Mets. Conectaron un total de siete jonrones, y lo más impactante es que todos fueron solitarios, una hazaña que no solo les permitió igualar un récord de las Grandes Ligas, sino que marcó solo la quinta vez en la historia de la franquicia que logran este hecho histórico.

Fue una noche soñada, donde Brandon Nimmo y Juan Soto brillaron con luz propia al contribuir con dos jonrones cada uno. A ellos se sumaron Francisco Lindor, Jared Young y Francisco Álvarez, quienes también añadieron sus propios cuadrangulares, completando el despliegue ofensivo. Los Mets sellaron una contundente victoria de 11-4, poniendo fin a una desafiante racha de siete derrotas consecutivas que tenía al equipo en una verdadera pesadilla.

La actuación de Juan Soto fue la pieza central de esta victoria tan necesaria. «Lo que pasó en el pasado ya pasó. Solo salimos a jugar buen béisbol y olvidarnos de lo que acaba de suceder», declaró Soto tras el partido para la transmisión oficial.

La noche de Soto fue espectacular: un rendimiento de 4 de 5 al bate, con cuatro hits (su cifra más alta de la temporada) y cuatro carreras impulsadas. Sus dos jonrones no fueron cualquier batazo; ambos llegaron después de trabajar la cuenta hasta 3-2, demostrando su disciplina y su capacidad para castigar los lanzamientos en momentos cruciales.

Los Mets pasaban por una mala racha y el rendimiento de Juan Soto fue clave para vivir una noche inolvidable. El jugador lleva mucha presión, ya que tiene el contrato más grande en la historia de las Grandes Ligas de Béisbol con un sueldo de 765 millones de dólares y un contrato por 15 años.

Con tales cifras, desde los Mets estaban esperando que la inversión diera frutos y en un partido como este, empiezan a ver los resultados. Fue un gran triunfo para los Mets y una noche soñada para Juan Soto.