El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) confirmó la salida de un adolescente de 17 años que, días atrás, se había presentado voluntariamente ante las autoridades en relación con el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay. El joven, de nacionalidad venezolana, abandonó el centro de emergencia del ICBF el lunes 28 de julio. Según fuentes extraoficiales, no existía ninguna medida restrictiva de libertad en su contra, dado que no está formalmente vinculado al proceso penal como acusado.
La Procuraduría General de la Nación manifestó su preocupación por lo ocurrido y anunció la apertura de indagaciones internas para esclarecer las condiciones en que se produjo la salida del menor, quien figura como testigo en la investigación. A través de un comunicado en sus redes sociales, el ente de control expresó su rechazo a lo que calificó como una «evasión» y pidió a las autoridades redoblar esfuerzos para ubicar al joven y garantizar su protección, considerando la relevancia de su testimonio para el caso.
Frente a los señalamientos, la directora del ICBF, Astrid Cáceres, aclaró que el menor no estaba bajo detención judicial y que su permanencia en el centro obedecía a un proceso de restablecimiento de derechos, ya que se trata de un migrante no acompañado. “No hay evasión porque no hay privación de libertad”, enfatizó. Mientras tanto, la Fiscalía continúa con las diligencias judiciales en torno al atentado que mantiene al senador Uribe Turbay en estado crítico en una unidad de cuidados intensivos de la Fundación Santa Fe de Bogotá.
