Un estremecedor caso de maltrato infantil salió a la luz en Puerto Aventuras, Quintana Roo, México; tras el rescate de un niño de tres años que vivía en condiciones inhumanas. La intervención se dio el pasado 16 de junio, cuando una denuncia ciudadana activó al Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (Geavig), cuyos agentes hallaron al menor en estado de desnutrición severa, con quemaduras de cigarrillo, marcas de golpes y signos de asfixia.
Las investigaciones señalan que la madre y el padrastro del niño, identificados como José Miguel «N», sometían al menor a constantes torturas. Según los testimonios, el pequeño era amarrado, encerrado en un costal, privado de alimento y solo recibía agua cuando pedía comida. El padrastro enfrenta, además, una grave acusación de abuso sexual en su contra.
La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo confirmó que ambos adultos fueron detenidos y enfrentan cargos por tortura y otros delitos. El menor fue trasladado a un albergue donde recibe atención médica y psicológica. Las autoridades continúan investigando este caso, que ha generado indignación y abre serios cuestionamientos sobre la falta de respuesta oportuna de las redes de protección infantil y la comunidad cercana.
