Un fuerte vendaval ocurrido el pasado 11 de agosto causó estragos en la Institución Educativa Antonio Nariño, ubicada en la vereda Morindo Santa Ana, zona rural del municipio de Los Córdobas. Al llegar al lugar, la comunidad constató que los techos de varias aulas fueron arrancados por la fuerza del viento, al igual que árboles y ramas caídas alrededor de la institución.
Los padres de familia y los niños que hacen parte de la comunidad educativa se muestran preocupados por la seguridad de los estudiantes y la posibilidad de clases presenciales en las próximas semanas. «Este daño es grave. El colegio ya venía con algunas falencias en infraestructura, pero ahora con los techos dañados, el riesgo para los niños aumenta. Necesitamos una respuesta inmediata», comentó uno de los padres de familia.
Ante esta situación, la comunidad hace un urgente llamado a las autoridades locales y regionales. Los padres de familia piden la intervención del Gobernador de Córdoba y del alcalde del municipio de Los Córdobas, para que tomen cartas en el asunto y restauren los daños lo más pronto posible, garantizando un ambiente seguro para los estudiantes.
El vendaval que azotó la región dejó varias zonas afectadas, pero la comunidad de Morindo Santa Ana teme que la falta de recursos o de acción inmediata retrase el inicio del año escolar para los niños de esta institución. Los padres y educadores insisten en que no solo es un tema de infraestructura, sino de la integridad física de los estudiantes, quienes pueden estar expuestos a riesgos mientras las clases no se reanuden.
Por su parte, las autoridades locales aún no se han pronunciado sobre la situación, lo que ha incrementado la preocupación en la comunidad educativa. La solidaridad de la comunidad es fundamental en estos momentos para brindar el apoyo necesario, mientras se espera una respuesta formal.
