El recién llegado a los Boston Red Sox quiere ser ‘polite’ y no se mete en problemas Leer
Todo parecía ser ‘miel sobre hojuelas’ tras la esperada llegada de Alex Bregman a los Boston Red Sox, y sin embargo hasta en las mejores familias se registran malos entendidos, y por supuesto diferencias de opiniones ante la llegada de nuevos elementos, como es el caso del antesalista que aterrizó en Fenway Park con bombo y platillo.
Más temprano que tarde, los problemas en la novena de Boston comenzaron a darse cuando el titular de la tercera base, Rafael Devers se inconformó con la simple posibilidad de que el recién llegado lo echara de su posición, algo que desde la dirigencia del equipo no se supo con claridad luego del anuncio de la llegada de Bregman desde la agencia libre y varios años con los Houston Astros.
Devers se hizo viral hace unos días cuando respondió con un simple «No» y una sonrisa socarrona a los cuestionamientos sobre si estaría dispuesto a ser bateador designado para que Bregman se instalara en su base. Después declaró por medio de un traductor: «La tercera base es mi posición. Es lo que juego. No sé cuáles son sus planes. Tuvimos una conversación. Dejé en claro cuáles eran mis deseos. Lo que suceda a partir de ahora, no lo sé«.
Si bien es cierto que el dominicano tuvo un desempeño más bajo que Bregman en su posición durante la última temporada, también lo es que Devers es considerado como el mejor en su posición en las Mayores, y se ha convertido en una especie de emblema para Boston, justo como lo fue David Ortiz. Y es precisamente ‘Big Papi’ quien zanjó el asunto con su perspectiva de las cosas: «No estás hablando de un jugador más, estás hablando de Rafael Devers, el mejor jugador del equipo. Bregman podría tener mejores números defensivos, pero no estás hablando de un jugador tipo ‘Mickey Mouse’, estás hablando de Rafael Devers«, dijo.
De acuerdo con informes del reportero de Mass Live Red Sox, Chris Cotillo, Bregman le está dando la vuelta a la situación y prefiere no meterse en problemas, al menos por el momento: «Creo que todos aquí creen en sus habilidades, pero si todos ponemos todo nuestro empeño en el juego tenemos una muy buena oportunidad de ser un equipo ganador. Sólo puedo hablar por mí, pero jugaré donde sea que ayude al equipo a ganar«.
Y es que destaca el hecho de que Bregman no ha querido hacer de esto un circo, y con su actitud y palabras ha mostrado además de clase, liderazgo y sentido de pertenencia y equipo. Y eso a estas alturas en Boston es tan sólo la primera de las muchas acciones que se esperan de su parte.
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