En su primera temporada con los Dodgers el japonés fue del escándalo de apuestas a ganar la Serie Mundial Leer
El año de Shohei Ohtani ha sido una verdadera montaña rusa de altas y bajas, y que al parecer no ha terminado.
Luego de firmar por $700 millones de dólares con Los Angeles Dodgers en diciembre de 2023, el pelotero japonés se encontró en un escándalo de apuestas antes del inicio de la temporada 2024 de la MLB, y todo acabó con un título de Serie Mundial el pasado miércoles, derrotando ni más ni menos que los poderosos New York Yankees.
Esto fue debido a que su traductor, Ippei Misuhara, estuvo metido en varias apuestas ilegales, y además este personaje confesó haber robado varios millones de dólares de la cuenta del pelotero para saldar sus cuentas.
Ohtani aseguró, tanto a directivos de Dodgers como de la misma MLB, que desconocía los manejos de Misuhara, quien en un principio declaró que Ohtani estaba enterado de todo, y que además el jugador le ayudaba a su deuda millonaria, lo que va en contra de las reglas internas de las Grandes Ligas, lo que ponía en riesgo la carrera de Ohtani en el beisbol estadounidense y su multimillonario contrato con la franquicia angelina.
Tras el campeonato obtenido por los Dodgers tras derrotar 4-1 a los Yankees en la Serie Mundial, la ciudad de Los Ángeles celebró a sus campeones con un desfile a lo largo de la ciudad californiana, y Ohtani sorprendió a todos al dirigirse a la fanaticada con un inglés casi perfecto.
Esto llevó a mucha gente a preguntarse si todo eso de la barrera del idioma fue parte de un juego de Ohtani en el asunto de las apuestas de su ex intérprete.
«Este es un momento especial para mí. Me siento muy honrado de estar aquí y orgulloso de este equipo en Los Ángeles, ¡gracias!» dijo Ohtani al dirigirse a la multitud de los Dodgers.
Es cierto que existe la posibilidad de que Ohtani haya memorizado su breve discurso, pero las redes sociales no perdonan, especialmente porque muchos cuestionaron la inocencia del nipón, a pesar de que las autoridades confirmaron que no tenía nada que ver.
A todo este misterio se agrega una respuesta que le dio Ohtani a un reportero antes del inicio del desfile de este viernes, y sin la necesidad de tener a su lado un intérprete, cuando le preguntaron si se iba a quitar la playera como varios de sus compañeros.
Ohtani no sólo entendió la pregunta, sino que además pudo responder sin mayores problemas, abriendo una vez más las puertas sobre las sospechas acerca de Misuhara y su posible complicidad con alguien con quien convivió durante la última década, durante más de 300 días al año.
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