Cansados de vivir entre el barro, las aguas estancadas y los malos olores, los habitantes del barrio La Candelaria alzaron su voz para exigirle al alcalde Said Bitar una solución urgente a la crítica situación de una de sus principales calles, afectada por problemas de canalización y deterioro vial.
Una adulta mayor, con tono de esperanza y firmeza, se convirtió en la vocera del barrio al elevar un llamado al mandatario cereteano: “Alcalde Said Bitar, usted es un joven que tiene proyectos y sabe escuchar a su gente. Ayúdenos, por favor”, expresó con voz entrecortada, en medio de la preocupación generalizada.
La comunidad asegura que han reiterado la solicitud en múltiples ocasiones, sin obtener respuestas concretas por parte de la administración municipal. “Hemos agotado los canales formales y aún seguimos esperando. Vivimos en condiciones inhumanas”, señalaron líderes del sector.
Las quejas no son nuevas. El mal estado de la vía ha generado afectaciones en hogares infantiles, riesgos sanitarios y malestar entre las familias. “Cuando llueve, es imposible salir. Hay niños que no pueden ir a la escuela y personas mayores atrapadas en sus casas”, denunciaron los residentes.
Ante la falta de soluciones, los habitantes advirtieron que, si no hay presencia institucional en los próximos días, realizarán protestas pacíficas en puntos estratégicos como la alcaldía o la transitada calle Cartagenita, para hacer visible su situación.
Durante una jornada de manifestación simbólica, adultos mayores, madres de familia y niños se unieron al clamor colectivo con una sola consigna: “¡Queremos solución!”. La escena dejó en evidencia la unidad de la comunidad y la urgencia de una intervención inmediata.
La ciudadanía espera que el gobierno municipal actúe con prontitud y honre su compromiso con los sectores más vulnerables. “La voz del pueblo debe ser escuchada. No pedimos lujos, solo una calle digna para vivir”, concluyó uno de los habitantes.
