Recientemente, la Fundación Cordoberxia alertó sobre una ola de homicidios que han venido ocurriendo en el departamento de Córdoba durante los últimos tres días, con seis asesinatos cometidos bajo la modalidad de sicariato en varios municipios, incluido el más reciente atentado en Lorica, el cual dejó un muerto y dos heridos.
Los ataques, en su mayoría relacionados con disputas entre grupos armados ilegales como el Clan del Golfo, incluyen asesinatos de personas señaladas de colaborar con la fuerza pública. Entre las víctimas hay campesinos, pescadores y líderes locales, que sufren además amenazas, extorsiones y desplazamientos forzados.
Dentro de los crímenes destacados está el asesinato de un agricultor en San Pelayo, presuntamente por informar a las autoridades sobre actividades del Clan del Golfo; así como el homicidio de otro hombre en San Carlos, a quien dejaron un cartel con la palabra “sapo”. Ambos casos estarían relacionados con retaliaciones de grupos armados ilegales.
En Ciénaga de Oro también fue asesinado un hombre identificado como José David Esquivia, quien presentaba heridas tanto de arma de fuego como de arma blanca. Mientras tanto, en Chinú y Sahagún se registraron otros dos homicidios con armas de fuego en zonas residenciales y rurales.
Frente a esta situación, la Fundación Cordoberxia exigió una mayor intervención estatal para garantizar la protección de la población y de los defensores de derechos humanos, quienes han sido víctimas de ataques y desplazamientos durante el segundo trimestre del año, los cuales se suman a los 49 homicidios reportados entre abril y junio.
