El cierre indefinido de la Panamericana agrava la crisis económica y social en Nariño

La preocupación en Nariño aumenta a medida que se extiende el cierre indefinido de la vía Panamericana, una de las principales arterias de comunicación del sur del país. A pesar de los esfuerzos del Instituto Nacional de Vías (Invías) por retirar más de 5.000 metros cúbicos de material que bloqueaban la carretera, la persistente inestabilidad del talud sigue impidiendo la rehabilitación de este crucial corredor.

Las autoridades locales advierten que, además de los desafíos logísticos, el impacto económico es alarmante. Se estima que las pérdidas diarias ascienden a 60 mil millones de pesos, afectando gravemente tanto a las empresas como a los hogares de la región. La situación también genera un desabastecimiento crítico de productos esenciales, complicando aún más las condiciones de vida de los ciudadanos de Pasto y otras localidades cercanas. La extensión del cierre ha intensificado las dificultades para la movilidad y el comercio, lo que genera un clima de incertidumbre y ansiedad en la población.

El panorama sigue siendo complejo, y las autoridades hacen un llamado urgente para encontrar soluciones que mitiguen el daño económico y social causado por este cierre prolongado.

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