Durante una audiencia reanudada este jueves, el fiscal Leonardo Manuel Urango solicitó al juez Promiscuo Municipal de Ciénaga de Oro imponer medida de aseguramiento contra los presuntos responsables del homicidio del ganadero sucreño Esteban Rafael Urueta González y sus trabajadores Fredys Manuel Beleño Acosta y Gerardo Marzola Coronado. Los hechos están relacionados con un presunto caso de estafa y hurto de ganado ocurrido en zona rural de Chimá, Córdoba.
Presuntos implicados
Según la Fiscalía, el conflicto se originó cuando un transportador de ganado llegó a Casa Rosa, en Cereté, a cobrar un servicio prestado a Urueta. El empresario, al notar inconsistencias en los pagos hechos por Cristian Mauricio Petro Almanza, le exigió un inventario de ganado. La situación derivó en una cita en la Ciénaga de Corralito, lugar donde se suponía estaban los animales, pero tras una inspección no se hallaron indicios de presencia bovina.
Las investigaciones revelan que el ganado fue presuntamente distribuido por Juan Fernando Soto Garcés, quien habría recibido pagos en efectivo por la venta. Su hermano, Miguel Soto Garcés, figura como vendedor de al menos una de las reses robadas, lo que motivó a la Fiscalía a solicitar también su investigación.
En total, las autoridades lograron recuperar 157 cabezas de ganado en varios municipios del departamento. El ganado, valorado en más de 929 millones de pesos, fue devuelto por los compradores al conocer su procedencia ilícita, asegurando que lo habían adquirido de buena fe. La investigación continúa para esclarecer plenamente los hechos y establecer responsabilidades.
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