En una audiencia clave celebrada este martes, dos de los presuntos agresores de Karina, una perrita de tan solo ocho meses, fueron formalmente imputados por el delito de maltrato animal agravado. El hecho, ocurrido el pasado 18 de julio en la vereda Las Babillas, zona rural de Montería, ha generado una profunda indignación y se perfila como un caso emblemático en la lucha por los derechos de los animales en Colombia.
De acuerdo con el equipo legal de Alegato Juristas, que representa a la víctima en este proceso, los señalados se negaron a aceptar responsabilidad, por lo que el caso avanzará a la fase de acusación. En esta etapa, se solicitará que se reconozcan varios agravantes, incluyendo la sevicia con la que se ejecutó el acto, su ocurrencia en vía pública y las lesiones permanentes sufridas por la canina.
Karina presenta fracturas en la mandíbula, una sección de nervio y otras secuelas irreversibles que han deteriorado significativamente su calidad de vida, convirtiéndola en un símbolo del maltrato animal que aún persiste en algunas regiones del país.
El alcalde de Montería, Hugo Kerguelén, quien ha venido dando seguimiento a este y otros casos similares como el de la gatica Alana, expresó su firme rechazo ante este tipo de actos. En sus redes sociales escribió:
“Hoy avanzamos en justicia para Karina, perrita víctima de crueldad en nuestra ciudad. Los agresores fueron imputados y el caso pasa a acusación. Reafirmo mi compromiso con el bienestar animal: ¡cero tolerancia al maltrato!”
Con esta imputación, el proceso judicial representa un paso firme hacia la justicia para Karina y refuerza la importancia de la protección animal como un asunto de interés público y legal.
