Tessa Romero, una mujer de 50 años residente en Málaga, España, vivió una experiencia cercana a la muerte que cambió su visión de la vida para siempre. La mujer fue declarada clínicamente muerta durante 24 minutos tras perder el conocimiento mientras conducía. La causa de su colapso se debió a problemas de salud no diagnosticados previamente. Durante ese tiempo, Tessa experimentó una profunda sensación de paz y alivio que la hizo reconsiderar todo lo que conocía sobre la muerte.
Mujer y su testimonio
Según relató al medio británico The Sun, Tessa pudo ver su propio cuerpo desde arriba mientras los médicos intentaban reanimarla. “Flotaba sobre mi cuerpo y sentía como si una gran carga se hubiese ido”, compartió. Aunque consciente de lo que sucedía, no podía interactuar ni ser percibida por los demás. Este evento, que ocurrió después de dejar a sus hijas en la escuela, cambió profundamente su percepción de la vida y la muerte.
Antes de la experiencia, Tessa vivía con miedo constante debido a problemas de salud sin diagnóstico. Sin embargo, tras su “regreso”, asegura que ha recuperado una paz interior y ahora valora cada momento. “Ya no tengo miedo de la muerte, la veo como un paso natural hacia algo más grande, lleno de amor y sentido”, expresó.
La ciencia continúa buscando respuestas sobre las experiencias cercanas a la muerte. Mientras algunos expertos argumentan que estos relatos son respuestas del cerebro ante condiciones extremas, otros no descartan la posibilidad de que puedan ser indicios de una realidad más allá de lo tangible.
El testimonio de Tessa ha generado un debate sobre la naturaleza de estas experiencias y cómo pueden afectar la percepción que las personas tienen sobre la vida, la muerte y lo que podría haber después.
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