Desde enero de 2025, el expresidente Álvaro Uribe Vélez enfrenta juicio ante el Juzgado 44 Penal del Circuito Judicial de Bogotá por los presuntos delitos de fraude procesal, soborno a testigos y soborno en actuación penal, relacionados con hechos ocurridos en 2018.
Durante el desarrollo de las audiencias, la Fiscalía General de la Nación ha presentado una serie de pruebas documentales y testimoniales que apuntarían a demostrar que Uribe habría, presuntamente, coordinado ofrecimientos económicos y presiones para favorecer su situación judicial. Uno de los testimonios más relevantes en este proceso es el del exparamilitar Juan Guillermo Monsalve, señalado como testigo clave por el ente acusador.
Por su parte, la defensa del exmandatario, encabezada por el abogado penalista Jaime Granados, ha utilizado diferentes recursos jurídicos para dilatar la etapa probatoria del juicio. Sin embargo, esa estrategia tiene fecha de cierre: el próximo 27 de junio la defensa anunció que concluirá la presentación de sus pruebas, lo que permitirá avanzar hacia la fase de alegatos finales.
En medio del contexto judicial, un hecho político llamó la atención el domingo 1 de junio. A través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), Jerónimo Uribe, hijo del expresidente, publicó una columna de opinión titulada “El testigo estrella”, en la que cuestiona duramente la credibilidad de Juan Guillermo Monsalve y los beneficios penitenciarios que, según él, este habría recibido.
En su texto, Jerónimo Uribe señala que Monsalve “vive mejor que el 99% de los presos en Colombia”, y recuerda que no fue admitido ni en Justicia y Paz ni en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Además, subraya que Monsalve fue condenado por delitos como extorsión y secuestro. “¿Cómo se justifican entonces esos privilegios? Muy sencillo, por declarar en contra de Uribe y decir que en la hacienda Guacharacas se fundó el bloque Metro”, escribió.
El pronunciamiento del hijo del expresidente surge en un momento clave del proceso judicial, cuando se intensifican los debates sobre la imparcialidad de los testimonios y el manejo del caso por parte de la Fiscalía.
El juicio continuará en las próximas semanas y se espera que tras la finalización del periodo probatorio, el juzgado defina las fechas para los alegatos de conclusión y posterior fallo.
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